FRAY
HORTENSIO FÉLIX PARAVICINO Y ARTEAGA. 1580-1633
Este retrato lo pintó
el greco en 1609. Hoy se encuentra en el Museo de Bellas Artes de Boston.
Fue autor de este
delicado y breve poema sobre El Greco:
“Creta le dio la vida, y los pinceles
Toledo,
mejor patria donde empieza
A lograr con la muerte eternidades.”
Fue Trinitario Calzado de Salamanca, y futuro capellán real y superior de los trinitarios, culterano de gran ingenio y agudeza verbal, fue poeta, orador, predicador. Se relacionó con los más
destacados escritores y artistas del Siglo de Oro.
Amigo de:
Reyes: Felipe II,III y IV, Felipe
IV lo nombra su Predicador Real;
Pintores: El Greco, Blas de
Prado, Juan Sánchez Cotán y Luis Tristán de Escamilla discípulo del Greco;
Poetas y escritores : Luis de Góngora, Lope de Vega y Francisco de Quevedo ;
Y religiosos como San Simón de Rojas, profesor
de filosofía y teología en Toledo 1581-87 y fundador de La Congregación de los
Esclavos del Dulcísimo Nombre de María.
Fue retratado dos veces por El Greco y este cuadro
pintado por el Greco en 1609, representa
el modelo que el pintor seguiría repitiendo a lo largo de su última época, y posteriormente sería felizmente interpretado
por Velázquez innumerables veces, con fondos neutros en marrones, grises y
ocres fríos… con una trabajada expresión
psicológica en el personaje: mirada
girada hacia el espectador y como
pensativa, ensimismada, mirada distraída y concentrada a la vez en algún pensamiento
secreto, y el modelado del rostro de una levedad impresionista porque la luz parece resbalar por el rostro haciendo casi que la piel palpite.
Expuesto
en el Museo de Bellas Artes de Boston, y conocido como ejemplo de retrato
psicológico, al que Luis Cernuda , poeta
imprescindible de la Generación del 27, le dedicó estos versos:
«Tú no puedes hablarme, y yo apenas
si puedo hablar. Mas tus ojos
me miran
como si a ver un pensamiento
me llamaran».
domingo, 19 de enero de 2014
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